En la mañana de hoy una treintena de afiliados furiosos reclamaban ser atendidos, golpeando la cortina metálica del local de la obra social (FOTO INTERNET), ante empleados que les decían que no podían atenderlos si no tenían turno; respuesta que más enfurecía a la gente porque la página web de la decadente obra social pocas veces funciona y es la única manera de conseguir turno.
No es la primera vez que los afiliados se quejan y reclaman por la mala atención que prestan los desganados empleados de la filial Lanús, muchos de ellos llegan tarde, no colaboran ni asesoran al afiliado para realizar su trámite, que en la mayoría de los casos es por retiro de medicamentos o autorizaciones para estudios complejos y de urgencia, pero nada los conmueve, ni aun cuando se encuentran ante personas mayores a quienes tratan con la misma indiferencia y desinterés.
Aunque sí cabe destacar la labor de la mujer policía que se encuentra en el lugar, que tal vez al ver la mala atención que brindan sus compañeros, busca ayudar a ordenar la fila de los cautivos y desprotegidos afiliados a una obra social que lo único que da es vergüenza.
IOMA es el ejemplo más claro de la decadencia de las prestaciones médicas en la provincia, conseguir turnos con profesionales médicos es casi imposible, y encima hay que sumarle la ineficiente atención que brindan algunos impresentables empleados de la filial Lanús. Señores, si no les gusta el trabajo siempre tienen la posibilidad de renunciar, el afiliado no tiene la culpa de que ustedes no tengan ganas de cumplir con sus funciones.
