El esposo de la víctima es, por estas horas, el principal sospechoso para la pesquisa, ya que la pareja atravesaba un conflictivo divorcio y la venganza sería el móvil del crimen. Además, la hipótesis del robo quedó totalmente descartada desde un primer momento.
Andrea Gabriela Pajón, de 39 años y de profesión docente, salió como todos los días a las 7 de la mañana de su casa, en Castelar sur para llevar a uno de sus hijos, Alan de 14 años, al colegio. Inesperadamente fue atacada por dos adolescentes que le dispararon un tiro en el oído provocándole gravísimas heridas y la destrucción de la mitad del cerebro, lo que ocasionó la inevitable muerte.
Las primeras investigaciones prácticamente descartan el móvil del robo y se inclinan por una venganza.
Al respecto, fuentes confiables indicaron que Andrea se estaba divorciando en forma conflictiva de su marido.
Al dialogar con Josefa Longitano de Urcovich, representante legal del Colegio Inmaculado Corazón de María donde se desempeñaba Andrea. “Estamos sumamente tristes por lo que le pasó a esta docente que desde hace siete años trabaja con nosotros en forma impecable. Actualmente se desempeña a cargo del cuarto grado y según lo que sabemos y pudimos charlar con sus familiares ella salió el miércoles de su casa (cita en Pasadores al 3075 de Castelar sur) como habitualmente lo hacía, para llevar a su hijo menor a la escuela y luego venir aquí. En ese momento y con el auto estacionado, se le acercaron dos jóvenes que directamente le disparan a la cabeza. Su hijo corrió a pedir ayuda y ella intentó levantarse pero volvió a caer sobre la vereda. Inmediatamente fue trasladada al Hospital de Haedo por una ambulancia que en el camino chocó, pero así y todo llegó a destino. En el hospital estaban de paro pero igual la operaron y le pudieron extraer el proyectil. Pero tras horas de agonía, la mujer falleció”, relató Josefa.
Su marido se llamaría Claudio Sartal de 40 años, y su domicilio en la calle Resero 331 de San Justo fue allanado en busca de pruebas.